LA PROFECÍA CUMPLIDA

                    LA PROFECÍA CUMPLIDA

Dr. Máximo Grillo Annunziata

En este mismo blog, hace ya un tiempo  pronosticábamos que la derecha iba a utilizar con Ollanta Humala la misma estrategia de Cayo Julio Cesar utilizó en su enfrentamiento con Pompeyo en la guerra civil romana por el control político del imperio.

Cayo Julio Cesar dijo: “primero combatiremos con un ejército sin general y luego con un general sin ejército”.

Lo que hizo la derecha fue combatir primero a un pueblo sin general, sin líder, traicionado por completo por Ollanta, abandonado,  sin trazas del gran proyecto de la gran transformación. En un caso único en la historia desconoció a todos los que le apoyaron, traicionó a su partido, a sus seguidores,  al pueblo, traicionó a Antauro, mandó a perseguir a los etnocaceristas, mientras negociaba con el Apra y los fujimoristas.

No solo los abandonó, sino que los persiguió.

Mantuvo la colonización del Perú por parte de Chile y del imperialismo. Traicionó a Venezuela y al chavismo. Era todo un judas, del cual no se puede confiar para nada.

Ahora la derecha combate a un general sin ejército, o sea a un Ollanta sin pueblo, sin partido, sin nadie que lo defienda.

Así le paga la derecha a Ollanta por haber sido el fiel perro guardián de sus intereses. ¿De qué le ha servido?.

Se merece lo que le pasa. Así sucede cuando se hacen negocios con el Diablo, con el Diablo  derechista. El pueblo empobrecido,  traicionado,  humillado, el pueblo humilde, el pueblo que tenía grandes esperanzas, que vio en este sujeto la salvación de sus derechos fue vilmente traicionado.

Más le habría valido luchar por la gran transformación, ahora no pasaría por el trance por el que atraviesa. Sin mando, sin ejército, sin pueblo y odiado  por las victimas de su traición, y despreciado por la derecha que lo utilizó, y que siempre lo desprecio, por militar, por cholo,   y por considerarlo su  cholito sirviente.

La derecha, primero lo utilizó y ahora lo bota como un perro y más encima lo encarcela.

Triste premio a la traición.

Esta es una de  nuestras profecías, que también se ha cumplido.

Y todo lo que profetizamos, se ha de cumplir siempre.